Son pequeñas estructuras diseñadas específicamente para concentrar los fumigantes en estado gaseoso. En su mayoría son para volver a utilizarse, poseen dispositivos para monitorear la concentración de gas, puertas especiales para reducir el tiempo de preparación y permiten su rápida aireación mediante sistemas de escape.
Es uno de los métodos que presenta más seguridad, ya que su hermeticidad hace que prácticamente no exista el tiempo medio de perdida (TPM), por lo que se requiere menos concentración de gas.
Se crea una cámara de aire utilizando láminas de plástico ó lonas, se deben ajustar grandes hojas de polietileno ó lonas de nylon a la estructura ó al artículo infestado, sellando a nivel de piso.
Es importante considerar distintos factores que afectan la capacidad de hermetismo de éste método y por consecuencia el tiempo medio de pérdida (MTP) para determinar el índice apropiado de uso, como ser la condición de las lonas de nylon y su sellado tanto al piso como las costuras entre sí, el viento, volumen del área cubierta por el encarpado y el tipo de superficie (piso ó base) en el que se realizará la fumigación.
Los edificios ó cualquier estructura edilicia se pueden sellar para efectuar la fumigación y utilizar dichas estructuras como cámaras para confinar el gas.
El sellamiento se realiza con polietileno y cintas aplicándolas en puertas, ventanas, ventiletes y toda abertura, utilizando cintas engomadas en aberturas pequeñas, uniones y fisuras.
En todos los casos debemos tener en cuenta que el fumigante necesita 24 horas ó más para llegar a los materiales a tratar, por lo tanto es recomendable efectuar los tratamientos empleando 72 horas para tener un resultado óptimo.
En todos los casos quienes deben realizar la apertura, cualquiera sea el método utilizado es el profesional en control de plagas, habiendo indicado convenientemente con carteles indicadores la realización de la fumigación.Antes de la Fumigación: